AUDIO DE LA CONFERENCIA

(FUENTE: Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala - CICIG) Guatemala, mayo 31 de 2017. El Comisionado Iván Velásquez Gómez participó recientemente en Lima, Perú, en el foro “La lucha contra la corrupción en América Latina”, donde compartió las experiencias de la CICIG en la lucha contra la corrupción y la impunidad en Guatemala.

El evento fue organizado por el Instituto de Estudios Social Cristianos, con el apoyo de la Fundación Konrad Adenauer Stiftung, con el objetivo de generar un espacio de discusión sobre dicho tema.

En su disertación, el Comisionado detalló los antecedentes de la creación de la CICIG -según acuerdo suscrito entre el Gobierno de Guatemala y la Organización de las Naciones Unidas (ONU)-, que tiene como función principal desarticular los cuerpos ilegales y aparatos clandestinos de seguridad (ciacs).

Recordó que los ciacs se originaron durante conflicto armado en Guatemala, que han evolucionado y se han adaptado a unas nuevas formas de organización  criminal.  Actualmente se  identifican como redes político económicas ilícitas, las cuales “tienen como distintivo ser organizaciones criminales con el propósito de acumular o ejercer el poder ilegítimo privado, enriquecerse ilícitamente y generar impunidad para sus miembros”, aseveró.

Líneas de investigación

Agregó que a partir de la identificación de estas redes, la CICIG definió varias líneas de investigación que se desarrollaron desde del 2014, las cuales se relacionan con la corrupción administrativa y judicial; el contrabando y defraudación aduanera, el financiamiento electoral ilícito; el narcotráfico y lavado de dinero, y las estructuras homicidas de alto poder.

“Se me planteaba qué había logrado Perú 10 años después de desarrollar grandes investigaciones, algunos afirman que se encuentra en una situación peor. Una respuesta que desde nuestra experiencia en Guatemala podemos ofrecer, es que la investigación criminal no es un fin en sí misma, sino que contribuye a un actuar del Estado que debe ser coherente, sistémico, de reacción frente a la criminalidad, porque los espacios que en virtud de la investigación se pueden ir recuperando de la criminalidad, si no son ocupados inmediatamente por el Estado, serán ocupados por las organizaciones criminales que tiene la capacidad de readaptarse, reacondicionarse y resurgir”, enfatizó.

Narcotráfico

El Comisionado se refirió a la intervención del narcotráfico en países como Colombia y Guatemala, en los cuales estas estructuras están cooptando las municipalidades para el tráfico de drogas, lo cual también causa corrupción en estas comunas.

“Un elemento indispensable en la lucha contra la criminalidad es extinguir los bienes obtenidos por estas estructuras criminales, creo que esta es una preocupación que tiene que existir en todos nuestros países porque si a estas organizaciones no se les incauta todo el beneficio que ha obtenido por esa actividad, difícilmente podrán ser desarticuladas”, manifestó.

El Comisionado también detalló algunos casos que en conjunto han investigado con el Ministerio Público, como “la línea”, “bufete de la impunidad”, “lavado y política” y la desarticulación de estructuras dedicadas al despojo de tierras, entre otros. También se refirió a la elaboración de informes temáticos como cooperación de la CICIG con el Estado guatemalteco, de los cuales destacó el Informe del Financiamiento de la Política en Guatemala, el cual “mostró que la corrupción es la que ha alimentado el sistema político guatemalteco”.

Reformas

Añadió que la CICIG, como parte de su mandato está apoyando las reformas para fortalecer el sistema de justicia guatemalteco. “(…) Hay una convicción que con las reglas actuales, la lucha contra la impunidad, la lucha contra la corrupción son realmente muy difíciles de combatir; muy difícil cuando no existe un órgano judicial y un órgano de investigación criminal realmente independientes”.

Calificó de fundamental la participación ciudadana en esta lucha contra estos dos problemas, la cual fue notoria cuando se reveló la investigación del caso “la línea”, y contribuyó a que con ese respaldo ciudadano al MP y a la CICIG se obtuvieran resultados positivos en las investigaciones contra la corrupción.

No obstante lo anterior, recalcó que era necesario ampliar la cobertura del sistema de justicia. “Algo que hemos reivindicado como un logro en el trabajo conjunto de la CICIG y del Ministerio Público es generar en la ciudadanía no sólo una esperanza sino también la certeza de que la lucha contra la corrupción sí es posible, que se pueden adelantar acciones exitosas de la justicia contra la corrupción.  Pero no es suficiente esta acción de la justicia como se está desarrollando, si no hay un incremento de la capacidad del aparato de justicia; también son necesarias las reformas constitucionales y legales para poder continuar y profundizar esta lucha contra la impunidad y contra la corrupción”, aseveró.